¿Te preguntas cada cuánto debes cambiar de colchón? Esta es una de las dudas más comunes que suelen consultarnos nuestros clientes ya sea porque no saben realmente si les toca comprar un colchón ya o porque quieren saber más o menos cuánto podrán disfrutar de su nuevo colchón.
Por supuesto, cuanto mayor sea la calidad del producto que hemos escogido para nuestro descanso más durabilidad tendrá. Sin embargo, hay otros muchos factores que pueden acortar o prolongar la vida útil de nuestro colchón.
En este artículo te explicamos cuánto dura un colchón y de qué depende. También te damos todos los trucos para saber si ya es hora de cambiarlo o no. Para acabar, te asesoramos contándote cómo elegir colchones de un tipo u otro según el uso que vayas a darle.
Cuánto dura un colchón y de qué depende
Como norma general, ten en cuenta que cualquier colchón dura un máximo de 10 años. A partir de la década de uso, no importa su calidad o cuánto te haya costado, ninguno mantiene sus propiedades originales.
Como media, podríamos situar la vida útil de un colchón entre los ocho y los diez años. Ten en cuenta que con el uso sus componentes van perdiendo su calidad y esto no solo afectará a la comodidad sino que puede perjudicar a la salud de nuestra espalda.
La vida útil de los colchones depende principalmente de cuatro factores clave. son los siguientes:
- Calidad: Las opciones de gama más alta se fabrican con materiales de mejor calidad que soportan mejor el paso del tiempo y la presión que ejerce nuestro cuerpo sobre ellos cuando descansamos. Podrás disfrutar más tiempo de ellos en condiciones óptimas, con menos deterioro y sin que se hundan prácticamente con el peso.
- Mantenimiento: Darle un uso correcto a nuestro colchón es imprescindible si queremos alargar su vida útil. Nuestro consejo es que prestes atención a las recomendaciones del fabricante. Por ejemplo, en el caso de los colchones de muelles, se recomienda voltearlos y girarlos cada cierto tiempo.
- Soporte: Tan importante es contar con un buen colchón como acompañarlo de un somier a su medida. Si la base sobre la que lo colocamos está en malas condiciones hará que se desgaste más rápidamente, afectando a nuestro descanso.
- Higiene: El uso del sobrecolchón es imprescindible para mantener unas condiciones óptimas de limpieza. También es recomendable aspirarlo de forma periódica para eliminar ácaros.
Cómo saber si debes cambiar de colchón
Hay tres razones principales por las que deberíamos de cambiar nuestros colchones: deterioro, pérdida de sus prestaciones o por motivos de higiene.
Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que todos los colchones, independientemente de su calidad o del dinero que hayamos invertido en ellos, se deterioran con el paso del tiempo. Incluso aunque no lo utilices todos los días, deberías de conservarlo durante un máximo de diez años.
Unida a la primera razón tenemos la segunda, el deterioro acaba trayendo consigo una pérdida del rendimiento y las prestaciones del colchón. Por lo general, esto se traduce generalmente en que se va deformando poco a poco. Si notas que se hunde en exceso cuando te echas en él o, peor, que al levantarte no recupera su forma; es hora de comprar uno nuevo.
Por último, en lo que respecta al higiene es importante tener en cuenta que, aunque lo limpiemos a menudo, el polvo, sudor, la piel muerta o los ácaros se acaban acumulando en el colchón. Es un punto a valorar especialmente en el caso de personas con alergias.
Cómo elegir tipo de colchón según el uso que vayas a darle
A la hora de elegir un colchón te encontrarás con numerosas opciones. Por ejemplo, si vas a utilizarlo en pareja y hay una diferencia de tamaño y peso entre ambos, sin duda la mejor apuesta es un colchón de muelles ensacados. Mientras que la personas con dolores de espalda apreciarán sin duda un buen colchón viscoelástico que se adapte a la curva de su cuerpo sin perder la firmeza.
Por otro lado, aquellos que busquen una opción con una buena vida útil; un buen colchón que puedan disfrutar todos los días durante años, deberían apostar por opciones de látex o viscoelásticos de la mejor calidad. Gracias su efecto memoria, se adaptan nuestro cuerpo pero recuperan la forma en cuanto nos levantamos; previendo que se deformen en exceso con el paso del tiempo.
En Dormideo hemos creado una completa guía sobre cómo elegir el colchón adecuado. En ella te contamos qué caracteriza a los diferentes tipos de colchones, las diferencias que hay entre unos y otros y cuándo decantarse por cada opción. También te recomendamos qué hacer en caso de sufras dolores de espalda o si buscas una opción para los peques de la casa. ¡Échale un vistazo y descubre cómo encontrar el compañero perfecto para tu descanso!
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